jueves, 18 de marzo de 2010

¿cuando nos hacemos adultos?

Me siento como una niña en el cuerpo de una joven que debe tomar decisiones de adulta
Es extraña esta sensación y mi pregunta es: ¿cuando nos hacemos adultos?
He buscado en internet y he encontrado un artículo de una señora llamada Isabel Hinojosa, en el cual describe lo que es "ser adulto", basandome ene este puedo decir que:

Soy responsable de mis actos, no estoy en deuda con nadie, actúo libremente, rechazo quejas inútiles, no pongo excusas para escabullirme del trabajo, agradezco la ayuda aunque no la pido, estoy abierta a nuevas opiniones aunque no las comparta, sé que no soy perfecta, que me puedo equivocar y rectificar, pero no me veo dispuesta al cambio, se que la realidad es cambiante y que todo es susceptible de ser cambiado pero no me veo capaz de afrontar los cambios.

“No debemos eludir por pereza o egoísmo esos retos personales que la vida a cada uno nos plantea. Descubrir y aceptar esto es muestra del verdadero despertar a la etapa adulta” Así que basándome en la cita del señor Alfonso Aguiló, no soy adulta.

Lo gracioso del caso es que: tengo un trabajo, hago 8 horas diarias más las extras de fin de semana que no cobro, tengo independencia económica, no pido dinero a nadie, con ese dinero pago las deudas que tengo con el banco, pago el piso donde vivo, pago la comida para todo el mes y estirándolo un poco cada mes pago las cenas y copas para salir con mis amigos. (Multiplicado todo por dos porque somos mi pareja y yo), tengo obligaciones para con mi familia, para con mi pareja y para con mis amigos. Me preocupo por ellos, intento ayudarlos y a la vez disfrutar de los momentos en que podemos estar juntos. Cuido de mi mascota, depende completamente de mí, de que tenga una casa donde pueda vivir, de que tenga comida cada día, y de que tenga cariño también. A todo esto le sumo la preocupación del futuro, que si ahorrar, que si liquidar deudas, que si comprar un piso más grande para cuando tenga hijos, porque esa es otra, que vida le quiero dar a mis hijos el día de mañana, sumándole el hecho de si seguiré teniendo trabajo.

Así que es gracioso pensar que aun teniendo todas las obligaciones de un adulto, me sienta como una niña con pánico al cambio, a considerarme realmente adulta y confirmar mis sospechas de que el resto de mi vida va seguir así, repleto de preocupaciones y obligaciones, y que posiblemente estas cada vez sean más grandes e importantes.

Pero no puedo parar el tiempo, tampoco puedo volver atrás, solo hay una dirección en esta vida y creo que me he sentado a un lado de la carretera, viendo a los demás pasar y mirando cómo se las arreglaban ellos. Me parece que tendré que levantarme y empezar a caminar, quien sabe a lo mejor me gusta eso de ser Adulta.

1 comentario:

Unknown dijo...

Por desgracia no eres la única que padece esta enfermedad, el envejecimiento! jajaja...
En "Psicología del envejecimiento" de Ian Stuart-Hamilton hablan de una edad umbral que marca el inicio de la vejez, discrepan pero va entre los 60 y 65 años.
Entonces, porque tengo la sensación de que estoy envejeciendo ya?
En cualquier caso nunca van a desaparecer obligaciones, quebraderos de cabeza o males mayores, porque es nuestro sino. Cada vez que superas un obstáculo te haces más grande, más poderoso para poder superar nuevos retos.
Ánimo compañera!